¿Cuántas Mabeles hay? “Siempre quise tener una vida mejor de lo que la realidad me ofrece”

Esta frase la menciona Mabel Valdiviezo en su auto-documental “Prodigal Daughter” (Hija Pródiga) que ha recibido Menciones Honrosas en el Festival de Cine Hecho por Mujeres y Disidencias y en el Premio APRECI (Perú), el Premio a Mejor Documental en el Arizona International Film Festival (USA) y ESTE JUEVES 20 se exhibe en California. Al escucharla vino a mi mente la impresión que me dejó cuando me buscó para profundizar en lo que era el “rock subterráneo”, no tendría ni 20 años. Creo que esa frase la ha seguido representando. 

“La cineasta y ex-artista subte Mabel Valdiviezo se reúne con su familia en Perú después de 16 años de silencio, enfrentándose a inquietantes recuerdos de su infancia y a un pasado problemático como inmigrante indocumentada en Estados Unidos. Ofreciendo acceso íntimo a la artista y sus vibrantes ‘foto-pinturas’ de la familia, Hija Pródiga es una exploración poética de los lazos familiares, la pertenencia y el poder transformador del arte a través de la narrativa de los derechos humanos, el género y la inmigración” dice la reseña de la película en mención. Leo ello y vuelvo a recordar esa tarde única en casa, que Mabel me visitó. Explico el contexto de época… Primero, eran tiempos violentos, donde ninguna chica (y tan joven)   iba a casa de un desconocido punk (como era yo), menos, de distancias tan lejanas como su casa o su Universidad, que, además, estaban cada una a extremos opuestos de la ciudad (prácticamente, periferias ambas, en ese entonces, de Lima) y más aún, diría, para una chica sensible y guapa (como lo era, como lo sigue siendo) pero ella era audaz y decidida a involucrarse en un tema que le interesara, como llegó a hacerlo, a su manera, en el fenómeno del “rock subterráneo”. Era inteligente, creativa y tenía actitud, siempre fue así. Creo que era ya, en ese entonces, una inmigrante del … status quo. ¿Y cuantos/as como ella lo éramos?   

Cuesta ponerse ante el espejo y verse tal cual. Asumirse, cuestionarse. Quizá ni uno mismo se sabe. Creo que Mabel nos hace confrontarnos con nosotros mismos. “Hija Pródiga” es un espejo colectivo; muchos tenemos familiares que han dejado nuestra tierra para buscarse un futuro en otras tierras; no sé cuántos tenemos historias familiares quebradas; ¿cuántas personas hay como Mabel en el mundo sin darse la oportunidad de recomponerse o, al menos, de intentarlo? Yo lo intenté, pero no sé si lo logré. Somos muchos los hijos pródigos de una familia… de una patria… de una realidad. Yo lo soy de todas ellas, viviendo, irónicamente, en la misma casa de familia, en el mismo país. Casi autoexiliado de la realidad tal cual. Nunca he ido a vivir a otro país, pero igual siento que vivo en un lugar donde no me hayo del todo.  

Una escritora española afirmó que el exilio es la patria, que un/a exiliado/a ya no es de un sitio en concreto. Hablaba del exilio como identidad: “¿Qué soy? Una exiliada”, se decía y concluía: “Tu lugar es el camino”. La vida misma es camino, Mabel nos da a conocer parte de su camino, lo conocemos en un determinado instante, desde un determinado ángulo de visión o apreciación y seguramente tenemos distintas lecturas de su obra cinematográfica; mientras su exhibición me interpelaba, a otra persona, sentada al lado mío, le hizo estallar en un llanto soterrado.    

Creo que Mabel con su película ha construido un lugar atemporal, que, independientemente de la época y de sus circunstancias, no se desvalorizará. Un lugar donde no solo estará ella. Ella pasa a ser muchas personas que se identificaran con ese espacio, es ya un sentir colectivo. Esa elección del tono impostado de su voz (narra el docu en primera persona) contribuye a ello. Es ella y no es ella, puede ser cualquier mujer, en cualquier época.

En este docu humanista, la directora nos conecta a nivel emocional y es que somos parte de una generación, de una familia, de una historia. Su mirada al pasado reciente del Perú nos hace comprobar que las heridas sociales no han cicatrizado, que, como decía el anarco Manuel González Prada, donde tocas con un dedo salta la pus. Además, “todo se mueve para que nada cambie”, otros paisajes, otros monumentos al cemento, otras tecnologías de punta que, por el contrario, nos deshumanizan… Y la esquina sigue siendo la misma, como decía Zcuela Crrada, banda “subte”.

Mabel, evocando la parábola bíblica, se reencontró con su familia 16 años después de haberse ido a Estados Unidos, luego enfermó de cáncer, pero no la postró… La misma realización cinematográfica (usando fotografías, alteradas, registros audiovisuales y un excelente manejo de animaciones, a cargo de terceras personas) y la pintura, que además ayudó a un acercamiento mayor con su progenitora (organizando una expo conjunta de las pinturas de la madre y de ella, ¡en los mismos Estados Unidos!), constituyeron un cauce para que el río de la vida siga circulando, sanando, reconstruyendo-NOS. ¡Bendita seas, Mabel!

Chequeemos el Tráiler:

https://www.youtube.com/watch?v=PJPxfL0LmVs

Wili Jiménez Torres

PRÓXIMAS PROYECCIONES DE “PRODIGAL DAUGHTER”

Tras ser exhibida en distintos festivales en esta estación del año, como el Festival de Cinema Peruvien de Paris (Francia), el 4 de abril, estas son las siguientes proyecciones:

- 20 de Mayo. La Peña de Berkeley Cultural Center en California (USA)

- 31 de Mayo. DePaul University en Chicago (USA)

- 14 de Junio. III Festival de Cine Peruano en Madrid (España). ¡Abre el festival!

- 11 de junio. Sala azul del CCPUCP en el 16th Festival de Cine al Este en Lima, Perú.

- 14 de junio. Sala azul del CCPUCP en el 16th Festival de Cine al Este en Lima, Perú.